Atención con los niños: 40 % de personas quemadas son menores de 18 años

- Del total de pacientes atendidos en la Unidad de Quemados del HIC, que brinda su servicio desde hace dos años, 136 han sido menores de edad.
- Los menores de 18 años suelen quemarse con líquidos hirvientes como agua, aceite, sopa, caldo y café.
- Expertos recomiendan evitar el ingreso de los niños a la cocina y verificar la temperatura del agua al momento del baño.
Bucaramanga, julio de 2021. En dos años de operaciones, la Unidad de Quemados del Hospital Internacional de Colombia (HIC), que mantiene desde sus inicios un promedio de ocupación del 95 %, ha atendido a un total de 340 pacientes, de los cuales 136 han sido menores de 18 años.
“Mientras que los adultos se ven afectados por elementos relacionados con su trabajo, como gasolina, electricidad o químicos, los niños suelen quemarse con líquidos hirvientes”, explica Carlos Ramírez Ribero, coordinador de la Unidad de Quemados HIC. En ese grupo de líquidos hirvientes el más común es el agua, con el 50 % de los casos, pero también se encuentran otros como aceite (19 %), sopa (14%), caldo (10%) y café (7%).
Según Ramírez, la piel es capaz de soportar temperaturas de hasta 40 grados centígrados, pero de ahí en adelante empieza a sufrir daños. Al llegar a los 70 grados ya hay pérdida de la piel y dependiendo del tiempo de exposición a estos agentes causales pueden presentarse diferentes tipos de quemaduras, que se clasifican de acuerdo a la profundidad de las lesiones.
Las quemaduras de primer grado solo afectan la capa más superficial de la piel, que es la epidermis, y generalmente son causadas por la exposición al sol. Estas suelen sanar sin dejar secuelas. Las de segundo grado comprometen un poco más de tejido, la epidermis y parcialmente la dermis, que es la segunda capa. “Este tipo de lesiones requieren de hospitalización y un manejo en una institución como la nuestra para acompañar la recuperación y manejar el dolor”, asegura el coordinador de la Unidad de Quemados HIC.
Cuando la lesión alcanza la grasa, los músculos y hasta los huesos, además de la epidermis y la dermis, la quemadura se considera de tercer grado. “Estas no duelen tanto como las otras porque los nervios se han quemado. En estos casos se debe reponer la piel que se perdió con el apoyo de cirugía plástica”, afirma Ramírez Ribero.
Ante una quemadura, lo recomendable es emplear agua al clima sobre la herida y consultar inmediatamente con profesionales de la salud. “Es importante mantener la calma y no utilizar remedios caseros, que lo que pueden hacer es infectar la herida”, señala la jefe de enfermería, Samara Bravo Alonso.
Para evitar accidentes con niños, se aconseja “no servir comidas calientes, no permitirles el ingreso a la cocina y tener una especial precaución con los cables de los electrodomésticos para que no estén expuestos”, indica Eloisa Leonor Araújo Arias, médica de la Unidad de Quemados.
Unidad de Quemados HIC
La Unidad de Quemados del HIC cuenta con 10 cubículos, quirófano propio, servicio de recuperación y sala de hidroterapia. Además, brinda servicios de terapia física, terapia ocupacional, terapia respiratoria, psicología, psiquiatría, nutrición y radiología intervencionista. En los dos años de servicio, el nivel de satisfacción de los pacientes ha sido del 99, 9 %.
“Hemos tenido la oportunidad de tratar muchos pacientes, no solamente de aquí de nuestro departamento sino de otros como Norte de Santander, Arauca, Cesar, Bolívar, La Guajira, Antioquia o Huila. Nuestro objetivo es crecer para ayudar a salvar más vidas y esperamos el próximo año abrir 10 cubículos adicionales”, asevera Ramírez.