La hipertensión puede afectar a cualquiera, sin importar la edad o el estilo de vida. Es por eso que es importante que te informes y tomes medidas preventivas.
La hipertensión, también conocida como presión arterial alta, es una afección crónica en la que la fuerza ejercida por la sangre contra las paredes de las arterias es constantemente alta. Si no se presta atención temprana, puede llevar a muchas afecciones médicas, como, por ejemplo, enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal y otros problemas de salud.
Pero ¿por qué se da la hipertensión? Existen varios factores que pueden aumentar las posibilidades de desarrollarla; entre ellos, se incluyen:
- Antecedentes familiares con esta misma patología
- Edad avanzada
- Obesidad
- Sedentarismo
- Consumo excesivo de sal
- Consumo de alcohol
- Tabaquismo
- Estrés crónico
¿Necesitas atención?
La presión arterial alta generalmente no presenta síntomas evidentes; De hecho, se han conocido casos en donde las señales no son visibles ni siquiera cuando las lecturas de presión arterial alcanzan niveles peligrosamente altos.
Algunas personas con hipertensión arterial severa pueden presentar síntomas como:
- Dolores de cabeza
- Falta de aire
- Dolor en el pecho
- Náuseas
- Visión borrosa
- Zumbidos en los oídos
- Dificultad para respirar
- Palpitaciones o alteraciones del ritmo del corazón
Sin embargo, estos síntomas no son específicos. No suelen aparecer hasta que la presión arterial alta haya alcanzado un estado grave o que pone en riesgo la vida del paciente.
El manejo de la hipertensión implica cambios en el estilo de vida y, en algunos casos, medicamentos recetados por un médico. Los cambios incluyen, seguir una dieta saludable y baja en sal, aumentar la actividad física, mantener un peso saludable, limitar el consumo de alcohol, dejar de fumar y reducir el estrés.
La presión se mide en milímetros de mercurio (mm Hg) y su valor se expresa en dos cifras, que corresponden a la presión sistólica y diastólica respectivamente. Dependiendo de los valores encontrados podemos tener:
- Presión arterial normal: es 120/80 mm Hg o inferior.
- Presión arterial alta: El valor máximo se sitúa de 120 a 129 mm Hg y el valor mínimo está por debajo (no por encima) de 80 mm Hg.
- Hipertensión de etapa 1. El valor máximo va de 130 a 139 mm Hg y el valor mínimo está entre 80 y 89 mm Hg.
- Hipertensión de etapa 2. El valor máximo es de 140 mm Hg o superior y el valor mínimo es de 90 mm Hg o superior.
Cuando la presión arterial es igual o superior a 180/120 mm Hg se considera crisis hipertensiva. La crisis hipertensiva es una emergencia médica. Si en tu caso, o en de alguien cercano se marca esta medida, debes buscar atención médica de inmediato.
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